28.04.2020

Poco me acuerdo de los anteriores 45 días de cuarentena.
Ya deja de tener sentido la palabra cuarentena.
No puedo recordar casi como me sentí en los anteriores 44 días. La linea del tiempo fue siempre indivisible, y ahora más.

Hay dos cosas que no paran nunca mientras estamos vivos, el tiempo y los pensamientos.

Nunca ha de ponerse la mente completamente en blanco. Deberíamos ser maestros budistas.
Por un momento pensé que este freno de mano que el mundo le puso a mi vida iba a colaborar conmigo misma.
Pero siempre estoy corriendo, aunque esté quieta. Estoy corriendo.
ayer quería estar acá y hoy que estoy acá quiero estar allá.

tengo que dibujar espirales.
Tengo que volver a hacer Mandalas, esa calmante simetría .
tengo que seguir leyendo
tengo que seguir mi camino de meditación


Los problemas gramaticales son fruto de cuando una escribe sin plan y hacen a este post.

Comentarios

Entradas populares de este blog

TERRAZA EN CUARETERNA

Crudo síntoma paradigmático